En 2007 Impedimenta se presentaba ante los lectores con un doble objetivo: por un lado, ser una editorial que ayudara a recuperar y revelar aquellas obras fundamentales del canon occidental que ya no se podían encontrar en las mesas de novedades de las librerías; y, por otro, presentar aquellas obras que consideramos merecedoras de la denominación de «nuevos clásicos modernos», con la confianza de que se incorporasen al canon de una manera consolidada. Dieciocho años después, y con más de trescientos títulos a nuestras espaldas, nos reafirmamos en nuestro empeño inicial de redescubrir aquellas obras literarias esenciales que nos acompañen en nuestro largo camino como lectores: obras que se lean, que se disfruten y que se guarden.